David Mzee caminó una distancia récord de 467m en la carrera de este año
En 2010, David Mzee tuvo una lesión de médula espinal y quedó paralizado. Pero gracias a un prometedor ensayo clínico financiado por Wings for Life, años después aprendió a dar sus primeros pasos de nuevo. En 2019, inspiró a miles de personas en todo el mundo cuando cruzó la línea de salida de Wings for Life World Run y recorrió la asombrosa distancia de 390m.
Hace apenas unos días, el 3 de mayo, David superó las expectativas una vez más al caminar 467m, un nuevo récord personal.
Cuando se cancelaron las Flagships y las App Runs debido a la situación sanitaria actual, David fue una de las 77.103 personas en todo el mundo que utilizó la App Wings for Life World Run para llevar a cabo su propia carrera y seguir recaudando fondos para encontrar una cura para las lesiones de médula espinal.
Motivados por participar juntos – separados
En su casa de Suiza, David comenzó la carrera en una pista con el sueco Niklas Sjöblom, ganador de anteriores ediciones de Wings for Life en Suiza y Sudáfrica. Los dos se animaron el uno al otro: Niklas terminó primero en Suiza una vez más, con una distancia recorrida de 62.1 km antes de ser alcanzado por el Catcher Car. David superó con creces su objetivo de 400m.
“Uno de los mejores recuerdos del año pasado fue la gente corriendo, aplaudiéndome y animándome. Eso fue súper emocionante,” describió. “Aquí en esta pista no tenía a tanta gente. Algunos corrían, saludaban y eso me dio mucha energía. Pude sentir a la gente del año pasado en mi corazón y fue realmente increíble sentir el apoyo y saber que tanta gente está corriendo con la App.”
La progresión en su tratamiento también avanza
David atribuyó su gran resultado a una funcionalidad mejorada en su cuerpo, así como a un duro entrenamiento en cinta con soporte de peso corporal. También compartió que fue ayudado por un impulso tecnológico: el hardware que proporciona su estimulación eléctrica había cambiado.
“Ahora la estimulación no solo se activa cada 1,5 segundos, sino que se activa cuando yo quiero,” explicó. “Si mi pierna golpea cierto ángulo, la estimulación entra en acción, de modo que me permite caminar a mi ritmo y medir todo mucho mejor. Hoy fue perfecto.”
David ofreció su sincero agradecimiento a todos los participantes y añadió: “Estoy feliz de que tanta gente haya participado con la App. La gente decía quería hacer algo, quería correr. Estoy con ganas de que llegue la próxima Wings for Life World Run y espero batir un nuevo récord.”
